21 nov 2016

Blue Demon

AÑO: 2014
DIRECTOR: Daisuke Kobayashi





















Me considero una persona muy paciente y perseverante en cuanto a adaptaciones de videojuegos se refiere, pero todo en esta vida tiene un límite y “Ao Oni” lo superó. En un principio solo me iba a ver la película y punto, ya que su atractivo póster y sinopsis me embaucaron, pero una vocecita me dijo por ahí que primeramente jugara al indie game. Yo os digo lo mismo, si tenéis oportunidad echaros unas partidas al juego porque merece muchísimo la pena (tiene acertijos al más puro estilo “Monkey Island” o “Maniac Mansion” y esto se agradece gratamente en nuestros días…).

La premisa es bastante simple: un grupo de jóvenes entra en la llamada “jail house”, una mansión abandonada, para investigar un poco y hacerse los machotes. Las cosas se torcerán cuando tras un breve incidente desaparezcan todos tus compañeros y tengas que buscarlos. Y ahí estás tú, delante del teclado y listo para una aventura de estrategia y de terror al más puro estilo de los juegos de antaño ochenteros.

En este tipo de adaptaciones lo que uno anda buscando es que mantenga el hilo original del videojuego (tarea también muy difícil considerando que hay que comprimir en al menos un par de horas todo lo que se tarda en el video juego). Si tenemos lo anteriormente dicho en cuenta podemos comprobar que el film se esfuerza por llevar a cabo la esencia del juego pero otra cosa muy distinta es que te funcione correctamente, y claro está que no lo logra porque este life action es una basura colosal de proporciones titánicas.

Para empezar la presentación y posterior puesta en escena del grupo protagonista es PENOSA  no, lo siguiente, pareciera como si la película te chillara desesperadamente que no empatices con ninguno de ellos porque al fin y al cabo no te da tiempo, cuando no andan descuartizados en pedazos… La psicología de estos personajes son la viva definición de “vacía”, no tienen nada ni siquiera un atisbo de personalidad suya propia que no haya sido copiada de otros tantos personajes casi idénticos a ellos. Por otro lado tenemos los típicos diálogos espantosos re ciclados y re utilizados sacados del típico anime moderno basura en el que el protagonista tiene complejo de pene pequeño y le avergüenza hasta mirar a una tía a los ojos, y de esto podemos saltar a la artificial relación entre los congéneres…

La búsqueda de pistas para poder seguir adelante (que era otro fuerte del juego) aquí no es más que una bromista gymkana cuya realización provoca sueño y aburrimiento. Lo mismo pasa con el plot twist final, que tira del maltrato escolar de turno para dar lástima. Perdona pero a estas alturas de la ya segunda década del siglo XXI no cuela. Las actuaciones mejor ni las nombro por miedo a que me dé una úlcera de estómago.

La música es paupérrima y los efectos de la cámara por delante del protagonista cuando va corriendo dan arcadas, en un intento de copiar las mismas técnicas empleadas por algunos youtubers.

Lo único salvable son los efectos digitales y los FX’s invertidos en los Oni (demonios azules), pero que al igual que el resto de metraje son desaprovechados sin explicarte su origen ni para qué están ahí ni nada.

Maloliente cinta escrita en una tarde y dirigida en cuatro ratos por un adán con síndromes de grandeza.

Una de las peores películas que he visto en el cine de terror japonés y una vergonzosa calamidad de adaptación.



20 nov 2016

Cursed: La Tienda Maldita

AÑO: 2004
DIRECTOR: Yoshihiro Yoshino























“La Tienda Maldita” como aquí se la tradujo en España, es una producción que desde el inicio denota el bajo presupuesto con el que contó, clasificándola automáticamente dentro del extenso y maravilloso, mundo del V-Cinema japonés. ¿Conoces al director? ¿Y a los actores? No, no te suena ninguno, y para gran parte de ellos ésta supuso su primera incursión en el cine y así empezar a labrarse una larga carrera (la chica protagonista encarnada por la bellísima Hiroko Satô) o bien abandonarlo al poco (casi todo el cast). De hecho el cineasta poco hizo después de dirigir Cursed… Lo que quiero decir con todo esto es que nos encontramos ante una película de tercera categoría y todo lo que ello supone, ergo, el trato “especial” que ha de otorgársele: efectos especiales pobres, actuaciones regulares, clichés, etc –elementos característicos de films for TV japoneses-.

Cuando la terminé de ver pensé lo mismo que ahora, tiempo después de haberla visto, la película es muy cutre. En todo. Y no me voy a poner a hablar de los efectos especiales, ni la cámara ni de tecnicidades de producción porque ya lo he dicho arriba, son cuestiones que hay que perdonarle (además que en lo personal a mí me gusta este tipo de cine de bajo presupuesto). Me refiero a la historia y a su desarrollo en sí, da la impresión de que tenían una buena idea entre manos pero no sabían cómo coordinarla ni llevarla a cabo, y en su fallido intento de ejecutarla patinaron haciéndola ver con algunos ápices pseudo-filosóficos o con tomas simplemente estúpidas de vergüenza ajena total. Si a esto le sumamos la patética música que se le incorpora en ocasiones ya es para pegarse un tiro.

El hecho de que una tienda de 24h esté embrujada da para quemar mucho carrete pero desgraciadamente no es el caso, y no entiendo el por qué, ya que producciones de factura sumamente pobre como la primera de Ju-On (2000) lograron su efecto de aterrorizar y dar miedo real mientras que Cursed lo intenta pero sin lograrlo. De hecho sus variopintos intentos de dar terror se quedan en eso mismo, intentos. Cuando no copia la mítica escena de Kayako apareciendo de un frigorífico o sino el típico pasillo oscuro y aterrador. Pero lo que más molesta es que aun habiéndose creado un regular punto místico como es la tienda, en ningún momento se revela nada, ni el personaje misterioso que ronda de vez en cuando, ni el por qué de la maldición ni las relaciones entre personajes. Simplemente crearon una maldición exprés, de estas de calentar en el micro 2 minutos, pero después queda un gran vacío, un algo que quiere saber el espectador y que nunca lo va a recibir. ¿Por qué? No lo sé, al igual que el director y guionistas, seguro.

Como decía, el que a cada cliente que vaya a comprar algún producto muera al rato se hace interesante pero después la película se va por la tangente desperdiciando muchísimo tiempo en mostrarnos como muere y así, desatendiendo otros factores más vitales como empujar la maldición hace un punto que guste y resulte un poco creíble (un poquito nada más). Los personajes son muy planos y no se los desarrolla en profundidad, sacándose de la manga un romance bastante soso y forzado que ni pincha ni corta.

Por otra parte comentar, porque es que sino reviento, los innumerables momentos de supuesta comedia que nos quieren vender. Son de lo peor en cuanto a gustos y no hace otra cosa que alargar al extremo una película de duración normal.


 En resumen, una idea desperdiciada, 


19 nov 2016

Diary

AÑO: 2006
DIRECTOR: Oxide Pang























“Mon seung” es el mejor ejemplo para seguir tomando con pinzas a los directores hongkoneses The Pang Brothers y es que después de haberme terminado su saga The Eye no daba mucho por ellos. Aunque me ha sorprendido gratamente esta producción de la década pasada no quita que en el futuro se echen a perder (te estoy mirando a ti, Nakata).

Diary es simplemente una película genial en todos sus aspectos, desde la narrativa con la que es contada hasta una edición que fluye con una difusa trama para seguir confundiendo al espectador. Comienza muy tranquila y a paso lento (típico del cine oriental) para ir enredándose más y más abarcando la enfermedad crónica de la paranoia y el aislamiento social como único punto de vista conque fue rodada la cinta. Esto es lo mejor del film y a lo que me refería antes, nuestra protagonista posee una enfermedad mental y la película no es más que los ojos de la chica interactuando con lo que le rodea, y de esta forma introducir al espectador en la turbia y perturbadora mente de una desviada mental. De hecho con este escueto pero atractivo ideal se pueden dar rienda sueltas a infinidad de películas y el hermano Oxide Pang decidió enfocarlo de una forma muy minimalista y personal: una joven que “pierde” a su novio y un día se encuentra con un chico que se le parece mucho…

Sabiendo que ya la estructura narrativa es fantástica combinando a la perfección la paranoia de la protagonista con el propio esquema técnico que tiene una película (introducción, nudo y desenlace que aquí se trastoca de forma juguetona); el segundo fuerte del film chino es ni más ni menos que la cámara. No sólo nos pone en situación con la chica sino que muchos de sus enfoques dan más de una posible interpretación cuando no, hace de flashback o de mero espectador de la función. La banda sonora tampoco se queda atrás, al igual que las brillantes actuaciones por el trío protagonista, remarcando con ahínco la de <Charlene Choi> (The Death Curse) y <Shawn Yue> (Child’s Eye) sin olvidarnos de la bella <Isabella Leong> (La Momia 3, Child’s Eye, Missing).

Poco más que decir de una producción exquisita en todos los sentidos e impecable como buen film de suspense que es.


Más que recomendada, 


14 nov 2016

Sector 7

AÑO: 2011
DIRECTOR: Kim Ji-Hoon























La fábula de la gallina de los huevos de oro es uno de los cuentos infantiles más conocidos en el mundo entero y es que su moraleja es aplicable a numerosos aspectos de la vida, y ahora que hablamos de cine no iba a ser menos. Sector 7 no es una película basada en el arte del cine propiamente dicho sino que nació en una fábrica de producciones en masa, una fábrica cuyo núcleo consistía en una gran gallina llamada “The Host” y que estaba siendo estimulada por las buenas críticas de “especialistas en el género”, pseudo-intelectuales del 3 al cuarto y otros tantos que aplaudían hasta con las orejas la idea de fundar una nueva era liderada por “El regreso de las monster movies a lo oriental”. Dejando a un lado que considero que el film de Bong Joo-Ho es una sobrevaloración colosal de proporciones piramidales, si nos damos la vuelta y miramos la gran trayectoria que tiene el cine asentiremos más de una vez que la idea de estrujar hasta la última gota una idea nunca ha terminado bien. ¿Ejemplos? ¿Quieres probar con los slashers kilométricos ochenteros americanos o con el SadaNami oriental del 2000?

Estamos ante una monster movie coreana que como ya he dicho aprovechó el tirón de su compañera antes citada para ganarse ella también un hueco y destacar. No es que esté en contra de esta táctica de copiar-pegar una idea y reproducirla (básicamente porque hay copias de “segunda categoría” que le rompen el culo salvajemente a cintas de primer orden) sino que cuando quieres desesperadamente querer llamar la atención y que tu film obtenga más fama por temas meramente técnicos que por la calidad que posee, el panorama no apunta precisamente a un horizonte brillante….bueno, depende si los que te la califican son modernfags neo cinéfilos fanboys de Michael Bay que por los efectos digitales se hacen 3 pajas y le coscan un 10 con llevar 5 segundos de metraje.

De hecho, para que comprendas lo que quiero decir basta con cambiar al cast surcoreano por americanos y ni te enterarías, me apuesto lo que tú quieras y ¿por qué? Pues porque Sector 7 está hecha con miedo, con miedo a perder, a caer en el olvido y para evitar eso el equipo se puso de acuerdo en realizar una película con una trama re contra arre vista hasta la saciedad, para no mojarse; saturarla hasta derramarse provocando una inundación de efectos especiales digitales de los que sobraron de hacer The Thing 2011 precuel y combinarla con el 3D que por aquel entonces lo petaba en las salas norteamericanas (¿he mencionado otra vez a USA? Upss vaya coincidencia, ¿no?).

No hace falta que te hayas visto todas las películas de monstruos de la historia para saber que este film es uno más entre el montón, y que de hecho no hace ningún esfuerzo por destacar y que como ya he dicho antes ni le interesaba, puesto que eso significaba arriesgarse cosa que no contemplaban los creadores. Y es así, me pegué todo lo que duró el film con la esperanza de encontrarme algo que llamase la atención pero desde los personajes clichés hasta las escenas de acción.

Suma: personajes estereotipados y que además son caracterizados de mala forma MÁS el típico escenario pequeño y reducido donde se desarrolla la trama MÁS típica escena donde se nos introducen al grupo que va a morir ¡OYE! Me has hecho spoiler! ¿Qué, no lo sabes? Pero si es un salsher con monstruos, no solo este film, sino todos las monster movies, ¿te pensabas que todos esos personajes no la iban a palmar uno a uno? Perdona decirte pero eso se lleva repitiendo desde que el primer alien puso sus pies en escena en 1979…

Además de tener que soportar hasta tener que suprimir las ganas de caer en coma con las situaciones pseudo graciosas que dan pena y vergüenza ajena, como esos efectos especiales para las muertes que dan ganas de liarse a ostias con el realizador encargado y ya ni hablemos de esos plot twist más viejos que el cagar que ya ni son plot ni son twists ni nada.

Pero alto un momento, no todo es tan malo en esta basurilla. Contamos con una creativa propuesta de la constitución del monstruo y esa escena final (TÍPICA) entre la chica que lucha hasta su último aliento contra el bicho. Tengo que admitir que antes ese tipo de partes me gustaban no, me encantaban que apareciesen en escena. ¿Y sabes por qué? Porque aparte de glorificar el lado más fuerte y el coraje de una mujer se mostraba como una realidad y sentías una completa compenetración con la chica poniéndote en su lugar. Obviamente, no estamos en ese caso, porque ¿adivinas qué? Sí, es un collage entre varias de esas escenas de varias películas y que además la chica se pega unos golpes y vuela más por los aires la pobre, que es imposible tomárselo en serio.


Aunque fuese una gran novedad en Corea del Sur por llevar allí el 3D y contar con unos actores que se desenvuelven bien no merece la pena perder el tiempo con esto. Hay filmes mucho mejores. 



13 nov 2016

Serie:: Trick 2

AÑO: 2002
CREADORES: YUKIHIKO TSUTSUMI, HISASHI KIMURA, MICHIZO KITO






















Considerando el tremebundo éxito en audiencias que cosechó en su totalidad la primera temporada (Trick) era cuestión de poco tiempo que lanzaran una segunda entrega de las peripecias de la hermosa maga Yamada y el apuesto profesor Ueda. ¿El resultado? Una más que buena segunda continuación.

No puedo evitar hacer comparaciones en cuanto a estilos se refiere, y tal como algunas sinopsis de internet rezan, “esta serie es como una fusión entre Expediente X con Scooby-Doo” y es que razón no les falta. Si te gustó la primera serie (como a mí) y le mezclas mucho humor divertido te queda un drama más que de notable categoría, como es el caso de Trick 2. Con una mejor calidad visual que su antecesora y más misterios para resolver, este dúo distópico se las tendrá que ver cara a cara con más estafadores, supuesto gurús y adivinos o lugares encantados. Y como ya mencioné en mi crítica a la primera temporada la perfecta combinación de humor con la investigación de los casos que se les presentan a los protagonistas resulta más que buena, yo diría hasta inmaculada; pero… ¿se podría haber mejorado? Mi respuesta es un sí rotundo.

Dejando aparte el perfectísimo y brillante desarrollo de la trama para cada uno de los episodios y su miga interna, he notado con bastante desventaja la evolución de nuestros protagonistas. En mi opinión no se les han imprimido tanto énfasis como sí a la complicación de los ya digo, nuevos enigmas de esta segunda temporada. Reflexionando un poco sobre esto en verdad no es tan malo, porque (aprovechando las comparaciones odiosas) en Expediente X se formó un salseo gubernamental entre Mulder y Scully y todos los episodios que se chupó la serie sobre eso (últimas temporadas sobre todo), quitándole relevancia a lo que en sí eran los verdaderos expedientes X, pero bueno, ya me desvío del tema.

A coalición quiero decir que los asiáticos, y en nuestro caso, los japoneses son una cultura que no dejan mostrar sus sentimientos por otros tan explícitamente como los occidentales y esto con nuestros ojos puede resultar difícil asimilarlo. Ojo, ¡por ningún motivo estoy pidiendo un lío amoroso ni mucho menos! (perdería en parte la gracia intrínseca que tiene la serie) pero de lo que todos estamos seguros es que son seres humanos al fin y al cabo qué menos que en ciertos momentos mostrar algo de ternura y alejarse de chistes fáciles o enfoques graciosos como sustitutos facilones. No sólo en cuanto a relaciones, sino en otras situaciones y sobre todo para Ueda, (su personaje lo llega a pasar mal en cierto momento pero rápidamente cambia de actitud según el guión, cosa que no cuaja) dejando para los últimos minutos del capítulo final “un algo”. Obviamente si comparamos cualquier episodio de esta second season con alguno de los de la primera vamos a encontrar una diferencia (¡normal!) pero lo que viene siendo la segunda temporada en sí, dentro de ella no existe tal desarrollo.

Antes he mencionado la poca evolución sentimental de los protagonistas, pero también me gustaría decir que no acoge a todos por igual. Yabe no es que avance mucho el pobre, pero sí que ya nos empezamos a percatar de algo en su ayudante (y más al final), cosa que se agradece bastante la verdad.

Esta vez tenemos un ending distinto al anterior y del cual me estoy empezando a cuestionar su más que posible simbolismo sobre la pareja protagonista. Además de los extras publicitarios que nos quiere vender la serie (como los libros del ahora profesor Ueda y que sí que sí, que se pueden comprar de verdad).

Poco más que añadir para una serie que va viento en popa convirtiéndose con el paso de los años en una de las mayores referencias en doramas de su género.



6 nov 2016

Den-Sen

AÑO: 2006
DIRECTOR: SHOZIN FUKUI























Nos encontramos ante una de muchas producciones del cine japonés “directo-a-video” que por allí es más que famoso, abriéndose paso con gran relevancia en la industria más comercial del cine y sirviendo para muchos cineastas como único cobijo para sus “low-budgets productions”.


El director al cargo de este found footage no es otro que Shozin Fukui, un tipo al que solo se le conoce por su ampliamente controversial y ridícula según otros, “964 Pinnochio”. Den-Sen o también conocida como “Suicide DVD” narra a modo de investigación como dos compañeros de trabajo con ayuda de una mujer también afectada por la muerte de un ser querido tras ver un DVD que promete suicidarse a aquel que lo ve. Las cosas se irán poniendo cada vez más turbias para el equipo al punto de que sus vidas podrán peligrar si no se andan con mucho ojo.

Por lo que he dicho no es más que otra peli que sigue los pasos de la gran Noroi (Kôji Shiraishi) re utilizando sus conceptos para, con una nueva historia, reproducir terror o suspense. Esto es como todo, o te sale bien o mal, y curiosamente en nuestro caso sale y punto. La historia comienza realmente atractiva, con una compañía productora de programas de TV sobre cocina, belleza, etc y un buen día les llega de forma anónima un DVD misterioso. Una chica de la compañía acepta investigar personalmente su contenido antes de tirarlo por no estar dentro de los requisitos de la empresa y a partir de aquí empieza el show.

Igual que con cualquier género que se ha reusado infinidad de veces, la miga del asunto hay que ir a buscarla en otros puntos, como el desarrollo de la historia, narrativa y credibilidad de los hechos “supuestamente reales” que nos presentar la película. Ejemplos positivos de esto pueden ser “Chichibu Demon” (que no engañe su portada), “Occult” o la clásica “Noroi”. En este film vemos que se esfuerza y consigue recrear con dificultad cierta atmósfera e investigación entre nuestros personajes pero que, por otro lado flaquea en varias ocasiones en cuanto a credibilidad, por no mencionar que en hasta tres ocasiones se pierde el efecto “cámara en mano” y así la veracidad de los hechos, objetivo de estos films. Además tenemos a uno de los personajes protagonistas cuyas actuaciones dejan mucho que desear (lentitud de movimientos, robotizaciones, gestos forzados) y otras tomas que pasan a ser ridículas cuando se las podría haber exprimido mucho más y mejor (enfoques más que nada)
.
También es más que palpable la infinidad de semejanzas a otras cintas del J-Horror que tiene la peli, como Ringu, Suicide Club, etc. De la misma forma ya advierto no guiarse mucho por la portada, ya poco tiene que ver con la peli siendo más bien un elemento captador de público (recurso inteligente en este tipo de mercado “casero”). 

Por lo que en parámetros generales se podría decir que está bien pero sin llegar a destacar ni quedarse en la memoria.


Para pasar un rato entretenido y poco más,


5 nov 2016

Chichibu Demon

AÑO: 2011
DIRECTOR: ¿¿??























Si te digo “found footage a la japonesa” seguro que la primera película que se te viene a la mente es Noroi, the curse; filme de Kôji Shiraishi muy rompedora en cuanto a estilos de terror orientales se refiere y que debido a ese éxito que se cosechó salieron cintas parecidas tiempo después (como cualquier blockbuster que se precie, hay que exprimirlo). En estas allá por el 2011 salió directamente al mercado DVD japonés un film de entre otros tantos del montón del J-Horror que poblan su prolífico V-Cinema una llamada “Oni Chichibu” conocida internacionalmente como Chichibu Demon o “A mountain incident” si lo prefieren.


Un tema que hay que tener en especial relevancia a la hora de hacer una película de terror es si se la quiere hacer tal cual, esto es con un guión y trama inventados o bien; basarla en eventos reales (corriente que se está poniendo “de moda” últimamente). Pues ese último camino es el escogido por este film, el cuál ahonda en la localidad de Chichibu en la prefectura de Saitama, Japón. Un cámara, ayudante del director y director van a esta ciudad para grabar una peli de terror DVD (directa al mercado V-Cinema, como la peli en sí) atraídos por varias leyendas sobre lugares encantados y demás actividades paranormales. Las cosas se tuercen cuando entrevistando a transeúntes se topan con un misterioso hombre que les relata un fenómeno sobrenatural que se da en las montañas a las afueras de la ciudad. De aquí en adelante el pequeño equipo de TV se verá envuelto en un incidente que les viene demasiado grande y que sin quererlo les podrá eclipsar.

Un recurso muy bueno en este tipo de metrajes basados en hechos reales es transmitirle al espectador la sensación de que a lo mejor no está viendo una peli (algo ficticio e irreal) sino que de verdad sucedió tal y como nos lo advirtieron nada más le dimos al play. Esta técnica para nada es nueva, recordemos sin más la gran controversia que levantó “El proyecto de la bruja de Blair”, y que “Occult” (obra del también autor de Noroi) puso en práctica satisfactoriamente. Pues bien, Chichibu Demon intenta en gran multitud de ocasiones esta técnica consiguiendo resultados muy favorables y que si eres una persona con una gran curiosidad por lo mostrado en la película llegas a informarte por si de verdad sucedió tal cosa.

Ergo, la dirección, narrativa y posterior edición y montaje de toda la gran investigación que realizó el equipo de televisión para ahondar en el misterio que les acontecía luce fabulosamente; atrapando al espectador desde el minuto uno. Per se, las actuaciones están al nivel aportando un plus a lo ya comentado.

En cuanto a la calidad de la misma, tiene la típica de una peli con un presupuesto escaso pero que aun así no da el cante por ningún lado y realmente transmite lo que se propone por lo que para nada es mala.

Por si lo mostrado en la peli no estuviera del todo perdido entre amplios interrogantes, si nos fijamos no existe una ficha artística de la producción. Ni del director, ni del guionista ni de actores; con lo que nos lleva a preguntarnos si de verdad pasó lo que nos informa el narrador al comienzo de la peli. Quién sabe…

Recomendación necesaria para un día lluvioso o si no lo tienen, una noche a solas con todo apagado. El mal cuerpo al menos, se lo gana uno.


Joyita OCCULTa entre las piedras, 


3 nov 2016

The Complex

AÑO: 2013
DIRECTOR: HIDEO NAKATA






















Desde hace algún tiempo ya me di cuenta de esto y cada vez que me topo con alguna película de la misma quinta intento creer que no caerá en la saca común, pero con más casos como el de The Complex no hace otra cosa que reafirmarse mi teoría. Y es que a partir del año 2009-2010 en adelante la industria del cine y más concretamente la de terror, inició una caída libre, estrepitosa y acelerada en cuanto a la calidad. No me refiero solo a la fabricación en masa de remakes, sino a estandarizar la técnica del Copia-Pega como única vía admisible de hacer películas del género habiendo rarísimas excepciones.


Si trasladamos lo anterior al continente asiático podremos apreciar numerosos ejemplos como las dos últimas de Ju-On (The Beggining y The Last Chapter), las Sadako de Hanabusa, la taiwanesa The Bride o la china Are You Here; entre muchas otra. “Cliché films” se las podría denominar y nunca más lejos de la realidad… Pero no sólo películas aisladas, sino directores en sí que para que no cayeran en el olvido recurrieron a la herramienta del copy-paste arriba mencionada para seguir realizando films, Hideo Nakata es uno de ellos. Ya se contempla en su obra más actual “Ghost Theater (2015)” y con “The Complex (2013)” se reafirma.
A parte de que el contenido de todo este tipo de films es EXACTAMENTE el mismo, igualmente están vacías por dentro. No poseen una esencia propia y autóctona con la que uno diga “por lo menos tiene tal cosa o cual cosa que oye, destaca”. Es como una fábrica de producción en serie, a granel y empaquetado.

Esta película engaña, te engaña, a ti pobre espectador que buscas algo distinto entre el montón. Jugó conmigo también, y eso es algo que no se le puede perdonar. No porque sea yo, sino porque te hace ver al principio que estás ante una nueva película de género muy interesante y atractiva para a medida que pasa la primera media hora- tres cuartos, empezar a vislumbrar algo distinto…

No entraré en detalles, porque para saber de qué va, leerse la sinopsis de reglamento, pero si advierto que tiene desde la maldición del bloque de apartamentos de turno (flashback a Dark Water y encima del mismo director, para mear y no echar gota) con el típico niño satánico poseído por la ira acumulada de un pasado turbio (y que además no tiene ningún sentido con lo que te muestra la cinta pero igual te haces el boludo y ya) y con la típica parejita que se enamoran pero hacen como que no porque lo pone el guión (con el típico comportamiento de retrasada para la chica protagonista) y ya para rematar, el típico exorcismo que no sirve de madres.

Quitando toda esa mierda del medio y como dije antes, comienza con altas expectativas y con un plot twist que uno se espera de un cambio radical a mejor pero que desgraciadamente termina en el cubo de la basura.

A destacar la música del famoso Kenji Kawaii y el plantel del principio. Buenas actuaciones.



1 nov 2016

Talk To The Dead

AÑO: 2013
DIRECTOR: NORIO  TSURUTA























Tercera y última entrega de la trilogía de terror “Next Horror” lanzada en el verano del 2013. En esta ocasión el director encargado es Norio Tsuruta conocido por Ringu 0: Basudei, Kakashi (Espantapájaros) o la adaptación life action de Orochi y que yo admiro mucho aun habiéndome visto pocos filmes suyos. ¿Por qué? Simple, sabe combinar a la perfección un drama doloroso y un buen terror sacando sentimientos encontrados en el espectador.


En esta nueva entrega y para cerrar por la puerta grande la saga nos alejamos del terror de las dos producciones anteriores para sumergirnos en una historia muy triste, real y crítica. La premisa es muy clara con sus intenciones: una chica tiene que cuidar de su hermano tras la muerte de su padre y el abandono de su madre, no quedándole otra que meterse en el negocio de la prostitución para poder mantener al pequeño. Un día se retrasa en el trabajo y al volver a su casa se encontrará un terrible escenario… Paralelamente una compañera del trabajo le habla sobre una app del móvil capaz de hablar con los muertos.

Como ya nos mostró el maestro en su Ringu, se nos presenta la típica maldición de turno a la japonesa pero aprovecha para introducir un drama muy bien conseguido y mezclado con terror. De hecho si nos damos cuenta el terror aquí no es el protagonista, es algo meramente circunstancial y secundario que había que ponerlo porque así lo exigían. Hablando de esto, dentro de los tres guionistas tenemos a Takashige Ichise, productor a la vez y también muy famoso por donde quiera que vaya por promocionar el “From the producer of The Ring and Ju-On” para atraer público (aunque después sea una mierda la peli, da igual).

Volviendo a nuestra película y al contrario de otras cintas, Ichise no mete la pata a la hora de colaborar en el guión (o igual Tsuruta tuvo algo/mucho que ver ahí, no se sabe) y queda un producto cuyo fuerte es darle a entender al espectador el negocio de la prostitución y cómo una joven tiene que recurrir a él cómo única forma de salir adelante y todo lo que ello conlleva: dejar al niño en casa la gran parte del tiempo, tener que lidiar con la escoria de su madre ahogada en deudas, problemas con los clientes, etc.

Entre tanta tristeza de por medio aparece también cierto personaje que al igual que todos los personajes de la trama su función es aprender, aprender de los demás y de las consecuencias; y que sin quererlo se verá inmiscuido sentimentalmente a niveles que él ya no creía posibles (como los demás).
Una lección para los personajes y una redención que cada uno de ellos tendrán que asumir, aunque les cueste la vida. Por otro lado y como ya pudimos ver en Kairo de Kiyoshi Kurosawa se nos presenta la tecnología como puerta al más allá. En la obra de Kurosawa eran los ordenadores y el internet en general y aquí aprovechando los nuevos tiempos tenemos el mundo de los nuevos móviles, los smartphones. He visto muy acertada la implementación de una aplicación que te permita hablar con los muertos y cómo le afecta a los personajes. Asimismo asistimos a una narrativa fabulosa que al principio aúna dos historias para, poco a poco, disolverlas bajo un mismo mensaje.

A pesar del bajo presupuesto y como da el pego (calidad TV-Movie, maquillaje, efectos especiales) a mí no me ha molestado en absoluto, supongo que puede ser porque ya estoy acostumbrado a las prestaciones del V-Cinema nipón. Pero en vamos, un peliculón de 5 estrellas muy recomendable para aquellos amantes del cine de terror asiático que vayan buscando algo diferente y con crítica social de paso.