14 nov 2016

Sector 7

AÑO: 2011
DIRECTOR: Kim Ji-Hoon























La fábula de la gallina de los huevos de oro es uno de los cuentos infantiles más conocidos en el mundo entero y es que su moraleja es aplicable a numerosos aspectos de la vida, y ahora que hablamos de cine no iba a ser menos. Sector 7 no es una película basada en el arte del cine propiamente dicho sino que nació en una fábrica de producciones en masa, una fábrica cuyo núcleo consistía en una gran gallina llamada “The Host” y que estaba siendo estimulada por las buenas críticas de “especialistas en el género”, pseudo-intelectuales del 3 al cuarto y otros tantos que aplaudían hasta con las orejas la idea de fundar una nueva era liderada por “El regreso de las monster movies a lo oriental”. Dejando a un lado que considero que el film de Bong Joo-Ho es una sobrevaloración colosal de proporciones piramidales, si nos damos la vuelta y miramos la gran trayectoria que tiene el cine asentiremos más de una vez que la idea de estrujar hasta la última gota una idea nunca ha terminado bien. ¿Ejemplos? ¿Quieres probar con los slashers kilométricos ochenteros americanos o con el SadaNami oriental del 2000?

Estamos ante una monster movie coreana que como ya he dicho aprovechó el tirón de su compañera antes citada para ganarse ella también un hueco y destacar. No es que esté en contra de esta táctica de copiar-pegar una idea y reproducirla (básicamente porque hay copias de “segunda categoría” que le rompen el culo salvajemente a cintas de primer orden) sino que cuando quieres desesperadamente querer llamar la atención y que tu film obtenga más fama por temas meramente técnicos que por la calidad que posee, el panorama no apunta precisamente a un horizonte brillante….bueno, depende si los que te la califican son modernfags neo cinéfilos fanboys de Michael Bay que por los efectos digitales se hacen 3 pajas y le coscan un 10 con llevar 5 segundos de metraje.

De hecho, para que comprendas lo que quiero decir basta con cambiar al cast surcoreano por americanos y ni te enterarías, me apuesto lo que tú quieras y ¿por qué? Pues porque Sector 7 está hecha con miedo, con miedo a perder, a caer en el olvido y para evitar eso el equipo se puso de acuerdo en realizar una película con una trama re contra arre vista hasta la saciedad, para no mojarse; saturarla hasta derramarse provocando una inundación de efectos especiales digitales de los que sobraron de hacer The Thing 2011 precuel y combinarla con el 3D que por aquel entonces lo petaba en las salas norteamericanas (¿he mencionado otra vez a USA? Upss vaya coincidencia, ¿no?).

No hace falta que te hayas visto todas las películas de monstruos de la historia para saber que este film es uno más entre el montón, y que de hecho no hace ningún esfuerzo por destacar y que como ya he dicho antes ni le interesaba, puesto que eso significaba arriesgarse cosa que no contemplaban los creadores. Y es así, me pegué todo lo que duró el film con la esperanza de encontrarme algo que llamase la atención pero desde los personajes clichés hasta las escenas de acción.

Suma: personajes estereotipados y que además son caracterizados de mala forma MÁS el típico escenario pequeño y reducido donde se desarrolla la trama MÁS típica escena donde se nos introducen al grupo que va a morir ¡OYE! Me has hecho spoiler! ¿Qué, no lo sabes? Pero si es un salsher con monstruos, no solo este film, sino todos las monster movies, ¿te pensabas que todos esos personajes no la iban a palmar uno a uno? Perdona decirte pero eso se lleva repitiendo desde que el primer alien puso sus pies en escena en 1979…

Además de tener que soportar hasta tener que suprimir las ganas de caer en coma con las situaciones pseudo graciosas que dan pena y vergüenza ajena, como esos efectos especiales para las muertes que dan ganas de liarse a ostias con el realizador encargado y ya ni hablemos de esos plot twist más viejos que el cagar que ya ni son plot ni son twists ni nada.

Pero alto un momento, no todo es tan malo en esta basurilla. Contamos con una creativa propuesta de la constitución del monstruo y esa escena final (TÍPICA) entre la chica que lucha hasta su último aliento contra el bicho. Tengo que admitir que antes ese tipo de partes me gustaban no, me encantaban que apareciesen en escena. ¿Y sabes por qué? Porque aparte de glorificar el lado más fuerte y el coraje de una mujer se mostraba como una realidad y sentías una completa compenetración con la chica poniéndote en su lugar. Obviamente, no estamos en ese caso, porque ¿adivinas qué? Sí, es un collage entre varias de esas escenas de varias películas y que además la chica se pega unos golpes y vuela más por los aires la pobre, que es imposible tomárselo en serio.


Aunque fuese una gran novedad en Corea del Sur por llevar allí el 3D y contar con unos actores que se desenvuelven bien no merece la pena perder el tiempo con esto. Hay filmes mucho mejores. 



0 comentarios :

Publicar un comentario